Tercera jornada en Guemes Island

Marina:
Conocimos a primera hora, gracias a Ian y Lisa, el taller y tienda de artesanía en madera de Ronald, Mitercraft. Pudimos ver el proceso de producción y también productos terminados. Hacen, sobre todo, marcadores de libros y posavasos, con motivos de lo más variados, con un acabado cuidadísimo.
Ron explica el proceso de producción


El equipo con Ron

Ian y Lisa nos acompañan al taller técnico artesanal de madera Mitercraft

Ron nos regaló unos cuantos y luego nos hizo un regalo aún mayor: una vuelta a la isla en su barco. La naturaleza del Archipiélago San Juan es impresionante se vea desde donde se vea, pero desde el agua es abrumador. El tiempo nos acompañó, como hasta ahora, con un día de sol y temperatura de la primavera más amable. Aparte de Guemes, en la que ya nos orientamos, vimos dos puertos y una reserva natural con abundante presencia de águilas. Una de ellas, de hecho, parece que salió a saludarnos con su elegante vuelo.

A continuación, comenzó una ruta con Ian en la que conocimos gente apasionante con unas viviendas de lo más originales. En primer lugar, llegamos a un punto alto de la isla a conocer una de las primeras instalaciones eólicas. Nos explicó que la energía que genera es tanta que puede venderla y que las baterías que tienen podrían permitir dos días de uso completo  de la casa si se estropease el molino de viento.



 La casa, por su posición en lo alto de la isla, ofrece unas vistas preciosas, especialmente desde un mirador a un lado del monte. A continuación, visitamos otra casa de amigos de Ian, aunque no viven allí. Sus grandes ventanales nos permitieron hacernos una idea de cómo está distribuida, dirigida también al mar y al bosque. Pero el secreto de la vivienda se encuentra en su mirador enganchado a dos árboles, al que se accede por un puente colgante construido por Ian y uno de sus hijos.


Seguimos la ruta hacia la playa en la esquina izquierda de la isla, donde se pueden observar los estratos de la tierra, que muestran la historia geológica de la isla, otra de tantas sus historias posibles.


Tras conversar con uno de los habitantes más antiguos de Guemes Island , que desde su Alaska natal llegó a la isla hace cuarenta años, fuimos a conocer la casa de Wendy y Eric, dos peregrinos del Guemes del Pacífico que pasaron por el Güemes español hace unas semanas, hecha con gran gusto en el diseño y originalidad. El último paso fue el cementerio, sencillo y austero, donde apenas sobresale alguna tumba. Placas en el césped con los datos es lo predominante, algo que muestra de nuevo la tendencia de los habitantes de Guemes a buscar el equilibrio entre ellos.

Nos abren de corazón sus casas, comparten sus vivencias y sabiduría, se entusiasman con nosotros por nuestro viaje, nos regalan su tiempo, nos cuidan. Nos une, en principio, solo una toponimia. Ahora es mucho más que eso: un aprendizaje continuo del significado de la generosidad.

0 comentarios:

Publicar un comentario